Evitar el consumismo volviendo a la escencia de las festividades
Terminó la Navidad y los excesos de año nuevo e inmediatamente ya empiezan a aparecer las ofertas de flores y chocolates para San Valentín. Las ofertas de temporada verano o invierno según se tu país se apresuran a posicionarse en los centros comerciales. No es raro ver promocones de Halloween desde Agosto e inmediatamente después todo decorado con motivos navideños desde octubre. Así también sucede con los países donde se celebra el día de acción de gracias, día de los muertos u otras festividades locales. Vivimos en una sociedad del consumismo; sin embargo, ¿hasta que punto puede esta tendencia influenciar en nuestras decisiones de compra? ¿Qué tanto estamos cambiando la celebración de las festividades por las compras vinculadas? ¿Será que mientras más compramos, más disfrutamos la celebración? No perdamos la escencia de las festividades, regresemos al origen de lo que realmente significa cada celebración. Compremos sólo lo necesario y no todo lo que tratan de vendernos. No